Como ya te dije, yo dejé dos años de fumar y volví, así que esta vez estoy decidida a dejarlo. Cuando lo dejé, lo hice sin parches, sin chicles, sin nada, sólo con el libro “Es fácil dejar de fumar si sabes cómo”, de Allen Karr (que murió hace dos años de cáncer de pulmón, por cierto, claro que llevaba 40 años fumando hasta que lo dejó). Ahora ni me lo he leído, con aquella experiencia y con cómo soy hoy en día y lo que he aprendido este último año (por cosas que no vienen al caso), aquí te pongo mis pautas, ya que llevo 48 h sin fumar. Ojo, son las cosas que a MI me sirven, que YO creo que funcionan, pero coge las que quieras y añade otras, por favor, esto se trata de apoyarnos el uno al otro y que la gente que quiera, nos de consejos.
-Lo primero de todo es que dejar de fumar es un hecho intrascendente. Nada de anunciarlo a bombo y platillo (tampoco esconderlo, si sale la conversación se dice, pero nada de publicarlo a los cuatro vientos). Nada de ponerse un día, una hora para dejarlo, eso crea más ansiedad. El mío fue anteayer: acabé uno a la 1 del medio día y a la media hora dije “el último”. NI lo disfruté conscientemente como si fuera el último, ni hice un ritual ni….nada, esto es una cosa normal, antes fumaba, ahora no, punto y pelota, nada de dramatizar ni de concederle una trascendencia que no tiene.
-El momento “a la mierda, me lo fumo”: tengo comprobadísimo por la otra vez y por estos dos días, que esa sensación dura exactamente (en mí) tres minutos. Y además no son acumulables. No es que te apetezca durante tres minutos, luego se pase y luego sean seis. NO. A los tres minutos pasa. ¿Quién carajo no puede estarse quieto tres minutos sin coger un “cilindrín cancerígeno”??. Trucos para esos tres minutos que yo uso:
-subir andando y bajar andando al quinto piso de mi oficina (más no, que me ahogo). Según vuelvo a mi despacho y me siento, estoy tan ahogada que no podría fumar
-atacar al agua. Además de lo beneficiosa que es para todo, mientras bebes, deglutes y te notas el estómago como si fuera una piscina de waterpolo, se pasan las ganas
-hacer una llamada telefónica a un cliente torracollons. Como sé que voy a discutir, no me acuerdo
Y flipa, esos tres minutos han pasado y….¡¡tachán!!! no has fumado.
Lo que NUNCA hay que hacer esos tres minutos (o los minutos que te dure el momento “a la mierda, me lo fumo”)
-Fumártelo. Obviamente.
-Comer. La otra vez que lo dejé dos años cogí 10 kilos en un mes y medio. Vale, no me venían mal pq pesaba 40, pero no, no, no. Se trata de dejar de fumar para ganar salud y coger kilos indiscriminadamente no es ganar salud. De ahí que te diga que te tires a degüello al agua como si fuera la mujer más hermosa del lugar que te dice “bébeme, llénate de mí”
(pártome toda, XD)-centrarse en el pensamiento obsesivo de que vas a pasar tres minutos infernales. (Se puede utilizar lo que en psicología se llama “la técnica del “stop” o hacerlo con una goma. Si no has oído hablar de ello, avísame y te lo cuento.
Vale, ya han pasado los tres minutos y ya no tienes ganas de fumar. Hasta aproximadamente dentro de una hora (si fumas como yo 20 cigarros diarios). Dentro de una hora, la historia se repetirá, pero tu cuerpo y tu mente habrán aprendido algo. En psicología existe otro principio que indica que lo que se aprende, ya no se desaprende. Y ahora estamos aprendiendo algo, nuestra mente y nuestro cuerpo saben que hay otra manera de reaccionar frente a las ganas de meterse un “churro nicotínico ajjjjqueroso” en la boca. Y tenemos que reforzar esa conducta.
Consideraciones generales que a mí me ayudan:
-NO PENSAR que esto es para siempre. La sola idea de que NUNCA JAMÁS voy a fumar me provoca una ansiedad espantosa. Así que voy día a día. HOY no fumo, mañana veremos. Y cuando llega mañana igual, HOY no fumo, mañana veremos.
-NO EVITAR estar con gente que fume. Ir escondiéndote no hace (al menos a mí) sino tener más presente aún que estoy en proceso.
-esto es muy raro y quizás no se entienda: me considero una DROGADICTA que está en plena rehabilitación. Vale, no me meto picos ni esnifo coca, pero me meto 20 chutes de droga cada jodido día. ¿¿realmente no te consideras drogadicto?? Esto es importante, nos estamos CURANDO, no estamos dejando de, sino curando de. Matiz, para mí, muy importante.
-Otra cosa que me sirve es llevar tabaco encima. Sí, suena masoquista, pero me quita la ansiedad. Si quiero, puedo fumar, no es la sensación de “son las 4 am, estoy en pijama, todo está cerrado y no hay tabaco hasta mañana”. Si quiero, puedo fumar. Si quiero, puedo fumar. Peeeeeeeeeeeeeeeeero, no quiero. Tan simple como eso. Para dejar de fumar sólo hace falta una cosa: no realizar el acto físico de encenderse un cigarro. ¿Realmente tenemos tan poco control sobre nuestro cuerpo como para obligarle a no ejecutar un movimiento? Que nooooooooo, que todo es una trampa de la menteeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee.
Bueno, hasta aquí mi experiencia y mis ilusiones de que esta vez lo consiga. Consejos, opiniones, críticas, ideas, iluminaciones serán bienvenidas.
Tsuni, PODEMOS. Y podemos porque QUEREMOS. Y convenceremos a Skamada (sé que no, pero de ilusión también se vive).
Bueno, me despido con lo que me repito cuando me levanto y seguiré repitiendo: “hoy día 2. 40 cigarros menos, 8 euros más”.
Besos
